¿Hombre común u hombre extraordinario?

El hombre común se sentirá cómodo haciendo el mismo trabajo por más de 40 años. El hombre extraordinario no se sentirá bien en ningún trabajo; entenderá rápidamente que nació para estar al frente, su orgullo lo hará pasar hambre, tendrá deudas y será pisoteado. No se alineará a lo convencional ni sentirá satisfacción al regalarle la obra de sus manos a otros.

Es en ese tiempo, quizás abunde el desempleo voluntario, la sociedad lo verá como un forastero, como un don nadie, y justo allí, cuando todo lo tenga en contra, en medio de la inmensa soledad, descubrirá sus talentos. Una vez identifique aquello que le apasiona, se hará imparable.

Quien creó el bombillo estuvo mucho tiempo viviendo a oscuras. Quien inventó el avión sabía que por aire no había tráfico; quien inventó los aparatos para manipular la electricidad observaba mucho el comportamiento de los rayos, quien crea una empresa observa mucho que un sueldo mínimo solo lo hará un esclavo.

Al saber que nació para gobernar, buscará la cima como sea posible. El talento y la perseverancia serán sus más grandes aliados, tal hombre no morirá sin ver lo que anhela.

Un hombre exitoso no es el que hace su trabajo bien; un hombre exitoso es el que pone a trabajar a los que no saben usar su cerebro. El éxito es para los rebeldes, mientras que los obedientes envejecerán esperando el bono de fin de año, conformándose con un salario por su retiro.

El exitoso no se conforma con nada, no es la ambición la que lo lleva a la cima; es más bien su deseo de no estar bajo el mando de nadie.

Ahora bien, en este momento político-social en que vivimos, Chihuahua y todo México, requiere de hombres y mujeres extraordinarios, que dejen de lado sus diferencias ideológicas, buscando más puntos de convergencia que de diferencia.

Mi llamado a nuestra presidenta, nuestra gobernadora, nuestros diputados tanto federales como locales, nuestros ayuntamientos municipales y tú y yo, ciudadanos comunes y corrientes a construir, más que a destruir, a ser mexicanos por convicción más que por conveniencia, en la construcción de un mejor México, un mejor Chihuahua, una mejor comunidad y por ende nuestra familia. Donde esta sea nuestro punto de partida.