México en los días de Trump
Hablar de violencia de género en Chihuahua es tocar una herida abierta. Desde la Alerta de Violencia de Género emitida en 2021, la realidad nos ha recordado una y otra vez la necesidad urgente de consolidar instancias que atiendan esta problemática con perspectiva especializada. Y es que, a pesar de los esfuerzos contundentes del actual gobierno estatal por fortalecer las políticas públicas dirigidas a las mujeres, el camino sigue siendo sinuoso.
Uno de los pasos más importantes en este trayecto ha sido la creación del Tribunal Mixto Especializado en Violencia de Género (TEVIOGEN). Para quienes no están familiarizados, este tribunal se diseñó para atender, desde su raíz, la violencia que viven miles de mujeres, niñas y adolescentes en el estado. Comenzó en 2015 en Ciudad Juárez, exclusivamente con competencia en materia penal, específicamente en delitos de violencia familiar. Hoy, su transformación en un tribunal mixto penal y familiar representa un avance que no podemos subestimar.
¿Por qué es tan relevante este tribunal mixto? Pensemos en esto: una mujer que enfrenta violencia familiar y, además, necesita resolver la guarda y custodia de sus hijos, antes debía peregrinar por juzgados penales y familiares distintos. Un proceso largo, desgastante y, muchas veces, revictimizante. Con el TEVIOGEN, esa misma mujer puede obtener justicia integral en un solo espacio, con personas juzgadoras que no solo entienden la ley, sino también las complejidades de la violencia de género.
Ahora bien, no todo es color de rosa. Consolidar un tribunal de esta naturaleza no es sencillo. Implica, primero, un cambio de mentalidad en el sistema de justicia. ¿Cuántas veces hemos escuchado que los asuntos familiares “no tienen nada que ver” con los penales? Este tribunal nos dice lo contrario: que los delitos de género y las figuras familiares están profundamente interrelacionados. Ignorarlo sería perpetuar un sistema que, durante años, ha fallado en proteger a las mujeres de manera integral.
Además, el TEVIOGEN no opera en solitario. Cuenta con comisiones interdisciplinarias de criminología, psicología, trabajo social y hasta minería de datos, que trabajan en conjunto para analizar cada caso desde múltiples perspectivas. Esta visión integral no solo enriquece la decisión judicial, sino que también permite identificar riesgos específicos, incluso el feminicidio.
Pero, claro, no faltan las voces críticas que dicen que un tribunal mixto es “innecesario” o que “duplica funciones”. La realidad es otra. Los datos son contundentes: Chihuahua registra una alta incidencia de delitos de violencia familiar y feminicidios. No se trata de duplicar funciones, sino de hacerlas más eficientes y accesibles.
El reto ahora es expandir la competencia del TEVIOGEN a todo el estado. Actualmente, opera en Ciudad Juárez y en algunos otros distritos, pero el objetivo es claro: lograr que este modelo esté presente en todos los Centros de Justicia para las Mujeres del estado, garantizando así una atención integral y especializada en cada rincón de Chihuahua.
En conclusión, el TEVIOGEN es una apuesta por una justicia que entiende la violencia de género en toda su complejidad. Sí, queda mucho por hacer, pero este tribunal nos demuestra que, cuando el sistema de justicia se alinea con la realidad de las mujeres, es posible construir caminos hacia una vida libre de violencia. ¿No es eso lo que queremos para Chihuahua y para México?
Minerva Correa Hinojosa
Consejera de la Judicatura del Estado de Chihuahua.
Licenciada en Derecho por la Universidad Autónoma de Chihuahua y Maestra en Administración Pública por la Universidad del Valle de México, cuento con más de 18 años de experiencia en el servicio público y privado, especializándome en Derechos Humanos, Responsabilidades Administrativas, Participación Ciudadana y la protección de los derechos de mujeres, niñas, niños y adolescentes.