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Ante sequía, alistan reglas de operación para dispersar 1,500 mdp
MORELIA, Mich., 11 de febrero de 2025.- Luego de que medios nacionales de comunicación informaran sobre la muerte de Pablo R., niño jornalero de 15 años, quien falleció el fin de semana, a causa de la explosión de una mina anti personas, sembrada por organizaciones criminales en el estado de Michoacán; los activistas Adrian Lebaron Soto y Bryan Lebarón Jones, presentaron el día de hoy una denuncia ante la Fiscalía General de la República (FGR) por el delito de terrorismo.
De acuerdo a un comunicado, el documento, que fue entregado en la Fiscalía Especial en Investigación de Terrorismo, Acopio y Tráfico de Armas, detalla que, estos hechos evidencían la brutal escalada de violencia que golpea al estado de Michoacán, ya que desde 2024 se han registrado explosiones.
Entre los antecedentes, se menciona que en marzo del año pasado, se informó de la detonación de una mina anti personas que mató a tres campesinos que viajaban a bordo de una camioneta en los poblados denominados como El Caulote y Las Cruces, en el municipio de Tumbiscatío, la explosión fue tan fuerte que mutiló las piernas de los fallecidos y dejó gravemente heridos a dos más.
Mientras que en diciembre del 2024, en Cotija y Buenavista, Tomatlán, al menos cuatro elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) resultaron muertos y siete lesionados en un operativo que pretendía desactivar este tipo de artefactos en Michoacán.
La denuncia también señala que, el 13 de enero pasado, un docente de telesecundaria falleció por la explosión de una mina, cuando se trasladaba a bordo de su vehículo por la brecha que conduce a la comunidad de Las Bateas a El Tepetate, en el municipio de Apatzingán.
Por lo que corresponde a los hechos que propiciaron la muerte de Pablo y su compañero José, de 43 años, durante su jornada de trabajo en una parcela de limón en la población de Santa Ana Amatlán, en el municipio de Buenavista Tomatlán, los activistas Adrián y Bryan LeBarón, expusieron que, la colocación de minas explosivas tiene la finalidad de causar terror para que los grupos rivales tomen la determinación de no pasar por su territorio, sin embargo, son las personas civiles las que sufren sus horrendas consecuencias. Adrián Lebarón expresó que, no se puede ser indiferente ante la aterradora realidad de que Michoacán es campo minado.
“No podemos ser indiferentes cuando un niño de 15 años muere por una mina anti personas en Michoacán. Pablo representa muchas, él estaba trabajando cuando se enfrentó a estos artefactos, ahora toda una comunidad tiene miedo porque cualquiera pudo estar en su situación y así millones de mexicanos. Por ello pedimos a la Fiscalía General de la República que investigue el caso como terrorismo. Es necesario que le pongamos nombre y apellido a lo que pasa en México”, dijo.
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